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"..
En un viejo libro donde yo pude leer hombres, nombres hoy perdidos, me
hicieron saber que más adelante en el mundo reinará un tiempo más justo
.."
canta Osvaldo Rodriguez
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1.- Cuánto
nos cuesta a veces responder a los escépticos, a los desconfiados, a
esos que se compran el discurso de que los sindicatos son malos y no
sirven, a aquellos que viven buscando el espacio por donde entrar en el
sistema y así asegurar su vida sin tener que pelear por nada y esperar
tranquilitos lo que va sobrando.
Nos
cuesta, porque también hemos hecho bastante para desprestigiar la
organización en la que participamos, con yerros que muchas veces dejan
en tela de juicio la palabra de los próceres que nos antecedieron en
esta labor, esos que literalmente dejaban los pies en las calles ganando
conciencias.
Creamos
o no, harto hemos hecho por desprestigiar la acción sindical,
descuidando lo prioritario al intentar poner la carreta delante de los
bueyes, esperando que todos los trabajadores estén listos para los
cambios profundos, sin siquiera tomar en cuenta que poco o nada hemos
hecho para explicar ese nuevo estado que proponemos.
El
sindicato es todo, partiendo por la reivindicación de cuestiones tan
importantes como generar los instrumentos para que el derecho a la
tranquilidad, la recreación y el ocio deje de ser solo un anhelo y se
transforme en cuestión real y efectiva.
No
solo la lucha económica y social, también el descanso junto a la
familia después de un año sacándose la cresta en la pega, son cuestiones
importantes a las que no debemos renunciar.
2.-
Una trabajadora que visitó nuestro Centro quiso saber cómo era posible
que pagara tan poco por disfrutar junto a su familia de algo tan bonito y
bien cuidado, en circunstancias que fuera de aquí, los valores son
hasta 3 veces más caros y no siempre se tiene la posibilidad de
disfrutar de un espacio amplio y tranquilo.
La
respuesta es simple, le dijimos. Usted paga una cuota a su Sindicato y
en ella va inmersa no solo el derecho a asistencia jurídica y social,
también la posibilidad de disponer de instalaciones para el trabajo
sindical, asesoría permanente en todo aquello que requiera más allá de
lo laboral y por cierto, la posibilidad de disfrutar de este Centro
Recreacional, construido con las cuotas que miles de socios de distintos
sindicatos pagan a la CGT mes a mes.
Aquí
no hay lucro, lo que paga por su uso sirve para mantener y remodelar
permanentemente las instalaciones y el objetivo es único y claro.
Demostrar con hechos que si trabajamos organizadamente podemos darnos
gustos tan importantes como estos y además compartir junto a compañeros y
compañeras de otras organizaciones, todas parte de la CGT y así
engrandecer la unidad y los afectos.
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Nuestra fuerza la Unidad
Nuestra meta la Victoria
MANUEL AHUMADA LILLO
Departamento de Comunicaciones y Difusión CGT CHILE