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"..En la capital lo hallé en un mercado, con su mecapal descargando un carro.."
canta Amparo Ochoa
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El temeroso (vamos a llamarlo así pues no le podemos cerrar jamás la puerta a la redención de un trabajador) vive lleno de desconfianza y miedo, se ha comprado el discurso de que si trabaja sin chistar, pese a los abusos, tendrá un ingreso seguro a fin de mes y no pondrá en riesgo su estabilidad laboral.
El cree que es parte de "una gran familia", un equipo humano fabuloso y se esfuerza por demostrar que tiene puesta la camiseta. No tiene límite en tiempo de trabajo si se trata de hacer algo que no estaba considerado, e incluso no reclama pago de horas extras por ese tiempo. Trabaja los días libres, renuncia a sus vacaciones e incluso hará el trabajo de otros si se lo llegan a requerir.
Siente, piensa, que si hace lo que se le pide no estará entre los que podrán ser despedidos, en caso de ajustes en la empresa donde trabaja.
Lamentablemente, tal percepción es errada estimado compañero trabajador. Para el capital nadie es imprescindible y solo le harán sentirse parte de un grupo selecto con la idea de mantenerlo alejado del colectivo e intentarán por distintas vías, sacarle información. No cometa el error de decir sí a todas las cuestiones que le demande la empresa, sin que haya compensación por ello.
2.- Si sus compañeros lo invitan a alguna reunión para tratar sus problemas, no vaya si no está dispuesto a rebelarse. Y si la tentación es más grande y luego de participar sale de esa reunión asustado y pensando en las penas del infierno, hágase el tonto y olvídelo.
No vaya a cometer el error de ir a contarle a los jefes que sus compañeros traman algo, por que en ese mismo minuto dejará de ser un asalariado abusado y pasará a ser un orejero despreciable, seguirá siendo asalariado y abusado pero además se transformará en soplón.
Un consejo para quienes van siempre con el bichito de la organización por delante. Nunca se confíen al 100%, el orejero puede estar en cualquier lugar, por lo que deben tomar siempre medidas básicas de resguardo.
Dejen caer por ahí sin que los vean, folletos de educación en derechos con un teléfono y un correo electrónico.
Asegúrense de dar muy bien cada paso cuando hagan contactos directos y trabajen cautelosamente, hasta formar una base inicial suficiente para cumplir los quórum mínimos. No olviden que hay fueros acotados cuando se trata de constituir un sindicato. Cuando estén ya con el ministro de fe dispuesto, comiencen a correr la voz.
Un consejo final. Vayan tomando las medidas para preparar un contrato colectivo, por si hay despidos una vez terminados los fueros de constitución del sindicato. También hay fuero previo para la negociación colectiva por lo que hay posibilidades ciertas de avanzar en la toma de conciencia de los trabajadores.
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Nuestra fuerza la Unidad
Nuestra meta la Victoria
Nuestra fuerza la Unidad
Nuestra meta la Victoria
MANUEL AHUMADA LILLO
Secretario C.G.T. CHILE
Secretario C.G.T. CHILE