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"..Que lindas son las obreras como las estrellas, trabajando noche y día que alegres son las obreras, bailemos con ellas.."
canta Quilapayun
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1.- Vivíase la primera tarde del 1 de Enero de 1980, cuando nuestro querido amigo Rubén Césped se apersonó por el lugar donde se reunían sus discípulos del ajedrez, para hacerles un regalo. Un cassette en el que en un español agringado, rendía un homenaje a la revolución sandinista.
El gringo contaba que algunas personas habían reunido todo este material e invitaba a escucharlo. Se escucha el Venceremos en música y coros del Ejército Rojo y luego se van relatando diversos episodios de la guerra, al tiempo que se escuchan canciones en las que se enseña a armar y desarmar un fusil, hacer distintos tipos de bombas, además de los resguardos que se den tomar para no ser sorprendidos por el enemigo.
Hay también una alta valoración por el trabajo de la mujer en la revolución y un tema musical de Carlos Mejia Godoy que se inicia con un discurso que dice:
"..Cuando estábamos en la cárcel, vino un oficial de la guardia nacional, lleno de alegría, a decirnos que Carlos Fonseca había muerto. Nosotros le respondimos...... Carlos Fonseca es de los muertos que nunca mueren".
Más de una hora estuvimos allí, absortos, ensimismados, con esos relatos de lucha que nos llamaban a no darnos nunca por vencidos.
2.- Han transcurrido algo más de 41 años desde entonces y durante todo este tiempo muchos y muchas fueron abandonando este espacio terrenal, incluido nuestro querido Ruben. Todos militantes de la vida, que nunca les hicieron asco a ninguna tarea y cuyo objetivo declarado era ayudar al pueblo en su formación y avance, superando las dificultades que se aparecerán en el camino para avanzar a esa sociedad más digna y justa, tarea que asumimos gustosos en nombre ellos, los que ya no están físicamente, pero vivirán siempre en espíritu.
Una de estos imprescindibles nos ha dejado hoy. Se trata de Luisa Toledo, a quien hace solo unos días habíamos tributado por su lucha incansable.
Luisa ha partido al encuentro de sus hijos y ocupa desde ahora, un espacio más que ganado en esta maravillosa familia universal de revolucionarias y revolucionarios. Nos deja la vara alta y deberemos trabajar duro para mantener en alto esas banderas que ella llevó sin descansar, por decenas de años.
3.- Como Carlos Fonseca, Ramona, Salvador, Teresa, Ruben, Ernesto, Luis Emilio, Clotario. Como tantas y tantos, LUISA TOLEDO TAMBIEN ES DE LOS MUERTOS QUE NUNCA MUEREN.
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Nuestra fuerza la Unidad
Nuestra meta la Victoria
MANUEL AHUMADA LILLO
Secretario C.G.T. CHILE