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"..Señores y señoritas en esta gran circunstancia voy a dejar la constancia de una traición infinita .." canta Violeta Parra
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1.- Más de una vez hemos escuchado decir a los trabajadores, que no son activos en la organización por que no tienen fuero. Una razón atendible sin duda, habida cuenta de que la acción patronal es particularmente dura cuando los trabajadores se levantan y exigen respuestas, independiente de si cuentan o no con fuero.
Sin embargo en ocasiones es más una excusa para justificar la inacción, porque cuando los abusos son evidentes tarde o temprano los afectados se rebelan y dan los pasos para buscar terminar con ellos. Se pagan costos, pero como dicen para hacer tortillas hay que quebrar huevos.
Sucedió hace algunos días en una de las tantas empresas que subcontratan en el aeropuerto internacional de Santiago. Los trabajadores, al constatar que el sindicato está cargado hacia la empresa se organizan para constituir una nueva organización. El trabajo no fue todo lo prolijo que debió ser, lo que provocó que la empresa se enterara y procediera a despedir a decenas de trabajadores, con contrato de plazo fijo e indefinido, lo que generó una estampida anulando la posibilidad de organización.
Este ejemplo de valentía se repite en muchos lugares y lo hacemos público para probar nuestra afirmación. No se requiere fuero cuando se busca reivindicar los derechos, no es necesario el fuero cuando se busca dignificar y defender los derechos de los trabajadores. Ahora, tampoco se trata de regalarse pues los luchadores no sobran.
Lo hemos dicho muchas veces, la construcción de los instrumentos debe ser con sigilo e inteligencia, sumar lentamente voluntades, reunir los quórum que se requieren y conseguir asesoría para la elaboración del estatuto y la gestión del ministro de fe. Este es el camino para iniciar la construcción de organización, de lo contrario se sufrirán reveses como el del aeropuerto y eso va a hacer muy lento el trabajo futuro de reorganización.
Ojo, no siempre se elige a los mejores la primera vez, y tenemos otros ejemplos donde los promotores de la organización lo hicieron solo para negociar sus salidas en mejores condiciones.
2.- Hay varios caminos para ir haciendo los cambios y ajustes que se requieren y uno de ellos es prepararse en las diferentes escuelas sindicales que toda organización de nivel medio y superior deben tener siempre activas. Ahí se integran aquellos que esperan incidir en la dirección de la organización y en el intertanto participan en equipos y comisiones de trabajo. Así se hacen conocidos de sus compañeros y compañeras y seguro tendrán el reconocimiento de estos en las elecciones que cada cierto tiempo se dan en las organizaciones.
Por eso los trabajadores deben estar muy atentos cuando se renuevan los directorios, porque entre sus compañeros hay más de alguno que está siempre participando, que no se queda callado si ve abusos y que puede llegar a ser un buen dirigente, sobretodo cuando hay que hacer cambios para optimizar la gestión de la organización.
De esa manera, lenta pero inexorablemente, la organización irá asumiendo su compromiso de clase y se pondrá a la cabeza de las aspiraciones de sus integrantes.
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Nuestra fuerza la Unidad
Nuestra meta la Victoria
MANUEL AHUMADA LILLO
Departamento de Comunicaciones y Difusión CGT CHILE