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"..No no lamento nada, nada de nada, ni el bien que me han hecho ni el mal, todo me da igual .."
canta Edith Piaf
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1.- Hemos escrito durante varios días sobre principios como la independencia, autonomía, libertad y gestión en la base. Y es que, en nuestra opinión, la crisis por la que transita el movimiento obrero organizado es de profunda data y no tiene mucha cara de ser solucionada, para así entrar de una a las cuestiones que requieren más urgencia.
Lamentablemente, la gran mayoría de las respuestas ante el abuso patronal son de coyuntura. Las expresiones de descontento, el material informativo, lo que se difunde por redes sociales, todo tiene como objetivo generar un estado de alerta precario, que se trata de mantener vigente yendo de una información a otra, pero sin el contenido suficiente como para que los trabajadores pudieran constatar que se está tomando nota del descalabro y se están dando pasos para corregir.
2.- Solo basta ver algunos datos estadísticos aparecidos en los ultimos días para constatar la profundidad de la crisis. En el año 2021 se realizaron 248 huelgas, de las cuales 57 corresponden a paralizaciones del sector público, 68 son llamadas huelgas extralegales y 123 corresponden a huelgas legales (49,6 del total de huelgas).
La cantidad de trabajadores involucrados en las 248 huelgas fue de 10.037 (10.037:248 = 40.47 trabajadores por movimiento), no obstante solo el 20% de esta cifra (2.007 trab.) participó en las huelgas legales (2007:123 = 16,3 trabajadores).
Al mismo tiempo se informa que el promedio de días de huelgas legales fue de 13.8 días y en cuanto a las huelgas ilegales el promedio llegó a 1,6 días. Si considera para el análisis que hay 1.000.000 de trabajadores organizados, concluirá que solo algo más del 1% hizo huelga durante en el año 2021.
¿Le queda claro a qué nos referimos con la palabra crisis?
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Nuestra fuerza la unidad
Nuestra meta la Victoria