PULSO SINDICAL Nº 216 DEL 10 AL 18 DE NOVIEMBRE DE 2013
30 años se cumplieron el 11 de Noviembre, desde que en 1983 el obrero Sebastian Acevedo Becerra se prendiera fuego en las puertas de la Catedral de Concepción, en un esfuerzo postrero por conocer el lugar adonde habían sido trasladados sus hijos detenidos por la CNI y conseguir su liberación.
Ninguno de todos los candidatos a cualquier cosa recordó siquiera este hecho horroroso, que fue posible dado el estado de cosas que se vivía en Chile por esa época y si alguno lo hizo fue silenciado por los medios de comunicación.
Una información aparecida en días pasados y que ha tenido escasa difusión, da cuenta del resultado de una investigación que deja en claro que Juan Pablo Jimenez habría muerto, no producto de una bala loca como han afirmado en su momento las policías sino por una bala disparada a corta distancia y probablemente desde el interior de la empresa AZETA, empresa que según se indica estaría en proceso de quiebra.
¿Y quien responderá por el asesinato de nuestro compañero sindicalista?.
Ninguno de los candidatos a cualquier cosa hizo mención en momento alguno de este hecho, ni exigió una investigación a fondo para conocer toda la verdad.
Se trata de 2 muertes de trabajadores, una en dictadura y otra en este remedo de democracia. Son 2 trabajadores, uno más joven, otro mayor, que pagaron con su vida el compromiso con la verdad, con la libertad y que están injustamente olvidados.
Cientos, miles son los casos como estos, de los que está plagada nuestra historia, sin embargo nunca se ha recordado ni rendido tributo a nuestros héroes.
Y para muestra un ejemplo:
El 17 de Noviembre, mismo día de la elección presidencial y parlamentaria, se conmemoró el 119 aniversario del natalicio de Clotario Blest Riffo.
Ni una sola ofrenda floral para recordar a uno de nuestros grandes lideres, ni una sola mención en el mismo momento en que al morir el día, los triunfadores y perdedores de la elección hacían mención a los trabajadores chilenos y el rol que deberán jugar desde aquí en adelante.
Como si esfuerzo y sacrificio que se pide a los trabajadores pudiera lograr que los que llegarán al parlamento, se acuerden de ellos una vez que estén definidos los resultados.
Eso solo será posible cuando los trabajadores por si mismos, determinen quien los representa. Antes seguirán siendo moneda de cambio.
Tan dolorosa como la muerte, aunque menos traumática y definitiva por cierto, es la cesantía a la que llegan muchos trabajadores de diferentes áreas de la economía, que se atrevieron a constituir sindicatos y presentar proyectos de contrato colectivo.
Las persecuciones, los hostigamientos, las listas negras, son pan de todos los días, pero en este país llamado Chile y aunque todos los candidatos hablaron de un nuevo Código del Trabajo, no se conoció ninguna propuesta concreta para poner termino a este flagelo. Y que se dijo respecto de los trabajadores contratistas y subcontratistas?.
Nada, por que no le interesamos a nadie, salvo para que sigamos jugando el papel de borregos que parecen habernos asignado los dueños reales del poder y quienes les hacen oposición.
Y aunque duela, digámoslo también.
La deficiente, pobre y limitada organización sindical existente, no tuvo la más mínima capacidad para incidir en las propuestas de los candidatos.
A lo más, algunos consiguieron colarse en alguna foto, pero de propuestas tan simples como el pago de sueldos cada 30 días, termino de la declaración y no pago de la AFP, no se escuchó hablar a ninguno de los candidatos.
Y que no digan que nadie se los mencionó.
Demoraremos un par de semanas en procesar los resultados de la elección presidencial y parlamentaria. Sin embargo estamos en condiciones de determinar algunas cuestiones iniciales.
1.- Llegaron a la segunda vuelta las candidaturas que se veían con mayor probabilidad de hacerlo. Manteniendo la coherencia con lo planteado y más aún luego de tanto años de experiencias fallidas se puede concluir, aún antes de la segunda vuelta mencionada, que poco o nada cambiará después del 15 de diciembre.
Hasta donde se sabe no hay quórum suficiente para modificaciones constitucionales, por lo que una de las principales aspiraciones de la ciudadanía, tomadas como bandera por la mayoría de quienes están en la oposición al gobierno de la Alianza, quedará trunca.
Resta por ver si, independientemente de disponer o no de quórum (tendremos que hacer un análisis a fondo de esto), se atreverán a presentar reformas que apunten de verdad a posibilitar y promover la organización y la negociación colectiva entre los trabajadores.
2.- Sigue siendo enorme la cantidad de ciudadanos que no participan del proceso electoral, sin embargo la lectura alegre de algunos, que intentan tomar para si esta abstención y mostrarla como resultado de una campaña organizada por ellos es, no solo peligrosa pues confunde, sino que tapa el problema de fondo, que no es otro que la falta de credibilidad en quienes se han postulado a los distintos cargos en esta ocasión.
No votar era una opción, pero es solo válida si quienes hicieron uso de ella tienen un proyecto claro de organización y tal cosa está muy lejos de ser real.
3.- Ha quedado claro que el binominal sirve a todos para hacer entrar por la ventana a quienes no tienen como cruzar la puerta. Sin asco han sido arrastrados a un cargo personas que sacaron una miserable cantidad de votos y se han perdido varios que pudieron ayudar, aunque fuera mínimamente a que las cosas fueran distintas.
Alianza y Nueva Mayoría se han servido del sistema para elegir parlamentarios, por lo que vale preguntarse si estos mismos estarán de verdad dispuestos a cambiar el binominal o simplemente le harán algunos ajustes para mantener las cuotas de poder que ahora el sistema les ha asignado.
4.- Los trabajadores deben estar mas que claros que simplemente se ha vivido un proceso de elecciones y que los electos poco o nada han dicho de lo que harán para que las cosas sean distintas.
Reiterar entonces el llamado a no perderse, si quieren participar en la segunda vuelta pueden hacerlo. Pero tengan claro lo siguiente.
Ni aunque una candidata se vaya a vivir en una casa de pobres por 4 días si es electa, ni que la otra diga que se vivirá en un Chile mejor mientras ella y sus promotores guardan silencio ante la brutal agresión de que fue victima la madre de Matías Catrileo, nos ayudarán a salir del problema en el que estamos.
Eso solo lo logrará la Educación, la Organización y la Lucha.
Los dados están echados, dependemos de nosotros para construir la sociedad a la que aspiramos. Los que ahora están no lo harán. Eso es definitivo
MANUEL AHUMADA LILLO
Presidente C.G.T. CHILE